Un recorrido de cuento de hadas de mano de los Hermanos Grimm

* En algunos lugares los visitantes son recibidos por los personajes de los cuentos.
* No solo los niños fantasean a cada paso.
* Los hermanos Grimm recopilaron estos relatos transmitidos oralmente.

Cuentos y mitos, leyendas y sagas, princesas y príncipes, casas de chocolate y bosques encantados, lobos feroces y “gato con botas”, sueños de la infancia que se hacen realidad en la ruta alemana de cuentos de hadas, relatos que se han hecho mundialmente famosos gracias a los hermanos Jacob y Wilhelm Grimm.


Para grandes y pequeños

Pueblos pintorescos, rincones desconocidos, escenarios mágicos y densos bosques salpican el recorrido que une Bremen y Hanau en una de las rutas más antiguas de Alemania, y que lleva a niños y a no tan niños a vivir nuevas aventuras por las más de setenta ciudades, comunidades y distritos que componen esta propuesta. Arte, cultura, paisajes inolvidables, ocho parques naturales, montañas, ríos, más de 600 kilómetros de trayecto para ir pasando las páginas de un nuevo cuento del que cada uno es su propio protagonista.

Aunque se trata de una ruta relativamente tranquila y desconocida, al llegar mayo los juegos al aire libre, los festivales y las semanas dedicadas a cuentos se suceden. Además, los más pequeños podrán disfrutar al ver que esos personajes de fábulas les dan la bienvenida y que pueden asistir a auténticos banquetes en mesas medievales.

La ruta nos devuelve al siglo XIX, nos lleva a recorrer lugares “de cuento” y a aquéllos en los que nacieron, vivieron y trabajaron los hermanos Grimm. Estos estudiosos de la lengua y las tradiciones alemanas fueron profesores de universidad (Göttingen) y viajaron por todo el país pidiendo a los lugareños que les contaran los relatos que de niños habían oído a sus padres y abuelos. Así recopilaron historias tradicionales, leyendas y cuentos que publicaron por primera vez en 1812 bajo el título “Cuentos para la infancia y el hogar”. En la actualidad, sus cuentos han sido traducidos a más de 160 lenguas.

De Hanau a Bremen

Ya sea en coche, caravana o en bicicleta, es requisito indispensable dejarse llevar por el ambiente, por los idílicos y románticos paseos, por ciudades llenas de arte e historia.

Las primeras paradas transcurren por lugares ligados de una u otra manera a la vida de los hermanos Grimm. Hanau, donde nacieron en 1785 y 1786 y se levanta una estatua en su honor, resulta ser el punto de partida perfecto para ir adentrándose poco a poco en el mundo de sueños e ilusiones, en un mundo de fantasía. De ahí, hasta Steinau. Entre sus casas de madera pasaron su niñez. Aquí es posible visitar aún la Casa de los Hermanos Grimm, que abrió sus puertas en 1998.

Mientras en Marburg fueron descubriendo el amor por esos relatos propios de la tradición oral, fue en Kassel, capital de la ruta de los cuentos de hadas, donde vivieron más de 30 años. Durante este periodo fueron recopilando los relatos, publicaron su famosa gramática alemana y comenzaron un diccionario de alemán. El visitante podrá adentrarse en el universo de los hermanos Grimm gracias al Museo que acoge el Palacio Bellevue (sin embargo, hay que tener en cuenta que permanecerá cerrado hasta otoño de 2011 por las obras de mejora que se están realizando).

Pero entre todas estas localidades, y hasta llegar a Bremen, uno puede adentrarse en las callejuelas de Schwalmstadt y emular a Caperucita Roja en su camino hacia el bosque. Su vestido está inspirado en el tradicional traje de la zona, y que todavía lucen las mujeres los días de fiesta.

Si lo prefiere, puede seguir los pasos que le llevan hasta el castillo Sababurg (en el bosque de Reinhardswald, Hofgeismar), donde la Bella Durmiente esperó el beso de su príncipe. Precisamente desde la torre del castillo de Trendelburg, donde Rapunzel dejaba caer sus trenzas para que el príncipe subiera, se puede disfrutar de magníficas vistas sobre dicho bosque. En los alrededores de Höxter se dice ocurrieron las aventuras de Hansel y Gretel, andanzas que son representadas cada verano en la plaza del mercado.

Para los amantes de los príncipes y princesas, Polle, de donde se dice que era Cenicienta. Y tras una parada para emular en Hamelin al “Flautista de Hamelin” y disfrutar entre el 25 de mayo y el 21 de septiembre de una representación de tan musical cuento, se acerca el momento de poner fin a esta ruta de aventuras en Bremen, de la mano del burro, el gato, el perro y el gallo de “Los Músicos de Bremen”.

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